Siento que la vida es absurda
no debí conocerte nunca
pues desde entonces no hay paz
y perdí la fe en los demás.
Y si hablamos de las culpas
que no supiste compartir
porque eran todas tuyas,
una y mil veces para mí.
Pero lamentablemente
la verdad es una sola
me dejaste por tu culpa
y esa es tuya sola.
Que quizás esté cubierta
por los ínfimos detalles
de muchos pequeños errores
que ocultaron tantas calles.
Qué no te di, qué pedías?
cuál fue mi gran error,
si otra lo da, buena suerte,
bien sabes, no es amor.
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